Diga a su hijo la palabra subrayada en cada oración. Pida a su hijo que repita la palabra. Luego lea toda la oración. Pida a su hijo que se ponga de pie o levante la mano cuando escuche la palabra.
- Esta es mi casa.
- La escuela es divertida.
- Estamos seguros.
- Estamos aprendiendo en la casa.
Platiquen sobre lo que significa para usted y su hijo cada palabra subrayada.